5 September 2007

Punset al ataque...

Eduard Punset propone la creación de una asignatura nueva que enseñe a los niños a desarrollar su afectividad. Este hombre es así. Después de su "Viaje a la Felicidad" y su "Viaje al Amor", ahora quiere que nuestros niños desarrollen su afectividad en las clases... porque debe ser que es algo que se puede enseñar en un aula.

Lo bueno es que podría diseñarla él, educar a los profesores en afectividad él, e incluso vender el material educativo... tiene una empresa que se dedica ya a ello. Por lo menos este viene con la mercancía envuelta y con lazo.

Su razonamiento me parece válido, pero la manera de enseñar "afectividad" creo que debería ser otra: las relaciones interpersonales espontáneas, por ejemplo. Dice ABC:

El escritor y periodista Eduardo Punset propone una asignatura "paralela" a Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos que enseñe a los alumnos a "gestionar sus emociones básicas". El profesor de Ciencia, Tecnología y Sociedad, considera "inconcebible" que en la pubertad se exija a los alumnos aprender diferentes idiomas y en cambio no se les prepare para "enfrentarse" a las emociones que "tarde o temprano" marcarán su existencia.

Como dice Miriam Peláez, una de las colaboradoras de Punset, en un artículo acerca de la cognición y la afectividad :

Y si la emoción y la cognición trabajan juntas, es impensable que a los niños de hoy se les enseñe a ejercitar su memoria, se les transmitan conocimientos en historia, matemáticas, lengua, literatura, física, química... y no se les plantee cómo han de reconocer lo que sienten hacia los demás, hacia su entorno; cómo enfrentarse a los conflictos, a los problemas, a las penas...

No es lo más raro que he oído, hay escuelas donde a los niños se les enseña Meditación Trascendental (que sí se puede enseñar en clases) y empiezan la jornada con un cuartito de hora de meditación. En especial en los niños de ciudad, les calma una barbaridad, según dicen estudios científicos. Me parece más eficiente*.

Nuestros niños van a acabar programados como Los Niños del Brasil (la foto es de la película). Por si alguien no ve la relación, recuerdo que en la película son los nazis los que programan a los niños.

Fuentes
Propuesta de nueva asignatura: ABC
Libros de Punset Viaje al amor y Viaje a la Felicidad: en su página.
Empresa de Eduardo Punset: SmartPlanet
Artículo de Miriam Peláez: en Comunidad SmartPlanet
Sobre la película: Los Niños del Brasil
La Meditación Trascendental en los niños: Maharishi Mahesh Yogi (esto es sarcástico*)

14 comments:

J.J.Mercado said...

El tipo me cae francamente bien. De hecho tiene bastantes tics liberales en sus libros. Por eso yo miraría con lupa lo que dijo exactamente. Puede que me equivoque, pero intuyo que lo único que hizo fue proponer algo que a él le parecería oportuno y útil en la educación de un niño, sin querer imponerlo a nadie, que es donde estaríamos ante el conflicto.
Ludwig von kisses.
PD: El artículo de su blog sobre las hormigas es bastante interesante...

Fonseca said...

Hola a todos.




Corleone, no me sorprende que Punset tenga tics liberales ni de ningún tipo. Simplemente es un tipo que está jodido y tendrá tics de todo tipo.

Es como Jodorowsky & Co, uno de esos flipados de la vida que siempre salen por la tangente. No se quien fué también el que dijo que habría que enseñar a los críos a pelársela en clase. Que nadie nace sabiendo...

Volvemos a la historia de "El traje nuevo del Emperador", quizás la mejor fábula sobre como funciona nuestra sociedad. Encumbramos al soplapollas de turno y diga lo que diga, haga lo que haga, intentamos justificarle.

Un poquito de por favor... ¡joder!

Beso la mano, Padrone.



Fonseca

Anonymous said...

Don, tics tiene aquí hasta el apuntador. A mí el tipo me cae bien. Pero es una sandez como la copa de un pinar entero... Entiendo que para la formación integral de un chaval, la parte afectiva es tan importante como la lógica-racional, pero de ahí a que corresponda a los colegios, es decir, al ministerio... es decir, al gobierno de turno (o a la Comunidad Autónoma) esos menesteres... PODIÓ!!!

Anonymous said...

¿Meditación transcendental? Yo hace no muchos años tenía media hora todas las mañanas de "Formación espiritual".

El aura que se la paguen los que quieran tenerla.

J.J.Mercado said...

Es que es ahí donde voy yo... ¿Ha dicho el bueno de Punset que el Ministerio debería hacer eso?
Lo pregunto porque no lo sé. Y si no lo ha dicho, no veo qué tiene de malo decir lo que le parezca sobre la educación... Digo...

Anonymous said...

Don Corleone, el Punset puede decir lo que quiera, lo malo es que le hagan caso. Y con el precedente de educación para la tiranía dan ganas de ponerse a hiperventilar en posición fetal.

Yo me leí el libro de Goleman "inteligencia emocional" porque me lo pasó un profesor en el instituto, y me encantó, pero de ahí a obligar a los chavales va un largo trecho.

Fonseca said...

Hola a todos.





Me da igual que el tal Punset quiera o no que la asignatura esa de "Educación afectiva" o como cojones quiera llamarla vaya a ser obligatoria, optativa o que se de en colegios privados. Es una gilipollez, se de como se de.

Por supuesto, si la dan centros privados al menos, no tengo que pagarla con mi dinero. Pero eso no lo convierte en bueno. Hay muchas cosas privadas estúpidas...



Fonseca

bastiat said...

Vamos a ver, un poquito de por favor..... Los que estamos a favor del Cheque Escolar, como mal menor en clara dejadez liberal puesto que aceptamos que el Estado nos saque dinero mediante impuestos para pagar el cole a todos los ciudadanos... lo estamos por el hecho de que en el momento en el que el Estado sólo pague y no se entrometa en la pedagogía ni en los contenidos, sólo, si acaso (otra dimisión de lo liberal) establezca qué conocimientos técnicos deben tener los estudiantes, comprobados mediante reválidas o selectividades varias, está claro que puede haber infinidad de innovaciones pedagógicas en las que puede estar incluido una metodología, en forma de asignatura o de comportamiento troncal en el centro, en el que se fomente la afectividad y “que enseñe a los alumnos a "gestionar sus emociones básicas"”. ¿por qué no? Al fin y al cabo es elección de los padres... ¿no?

Ahora bien, aunque no creo que sea el caso, como reducción al absurdo del asunto de EpC me parece estupendo. Una asignatura de EpC, otra de Afectividad, otra de sexualidad avanzada (eufemísticamente hablando, Fonseca), otra de interpretación de las corrientes musicales en el Rock del Siglo XX... en vez de matemáticas, lengua, física, química, latín, literatura española (que puede ser sustituida por las raíces suevas de la lengua “galega”.... o sea....

Anonymous said...

Halcón, a mí de Goleman me gustó más El Punto Ciego, acerca de la memoria selectiva.

Yo estoy con Fonseca y Bastiat: no con mis pelas, oiga!

Anonymous said...

El bueno de Punset debería explicarnos a todos -ups, perdón! a todos y a todas-, su fantastico proyecto de la Fundación Foro de la mano del entonces todopoderoso Conde y la Gran Logia de España (sí, esos, los masonazos) para la creación de una alternativa al psoe y pp en los 90.
Venga Edu, un monográfico sobre el tema en Redes. A que no hay huevos.

J.J.Mercado said...

Pues a mi, hombres y mujeres de dios, lo único que me importa es, fonseca -que parece, coño, que has veraneado con iracundo...-, si "el tal Punset quiera o no que la asignatura esa de "Educación afectiva" o como cojones quiera llamarla vaya a ser obligatoria, optativa o que se de en colegios privados". Que parece que el caso es sacar la escoba a diestro y siniestro, carajo.

Anonymous said...

Si en su colegio privado quiere impartir esa clases, pues muy bien por él.

Yo me adhiero más a la postura de en vez de estar discutiendo sobre una boba asignatura. Propongo, que se imparta educación financiera.

Entonces, resumiendo, Viva el amour!!!

Besos Mon Amour. Lol
Au revoir.

Je t 'aime

Anonymous said...

Punset siempre me ha caído bien. De hecho, Redes (y el programa de entonces de Dragó, que iba antes) fue de las últimas cosas que veía hasta que –hace ya tres años y pico– decidí que dejaba de adorno el aparato de televisión. A veces dice cosas que me dejan a cuadros, con las que no puedo estar de acuerdo. Pero, en fin, en general, me interesa, me hace pensar.

Todo lo cual no me impide decir que a mí todos estos iluminados, todos estos elitistas (estos Savater, y demás) que se empeñan en decirles a los demás lo que deben enseñar sin tener ni puñetera idea de lo que hoy por hoy es una tarima ya es que me están tocando las narices más de la cuenta.

¿Sabe acaso Punset que lo que ya apenas se puede enseñar es Lengua, ni Literatura, ni Matemáticas ni Física ni nada, porque las leyes de educación están pensadas básicamente para que no se pueda? ¿Todavía quiere esta minerva que se dedique más tiempo a gilipolleces, a Seguridad Vial y tal y cual, a cosas que perfectamente pueden enseñar los padres, en vez de dedicarlo a lo importante, a la transmisión de conocimientos (sí, conocimientos, contenidos: esa cosa tan facha de que haya que estudiarse las cosas hasta sabérselas y demostrar luego objetivamente que te las sabes, en vez de esta vaguedad siniestra de evaluar procedimientos y actitudes)? ¿Cabe aprendizaje afectivo más útil para la vida que enterarte por ti mismo de que si te esfuerzas y trabajas hay premio, y si no lo haces no, que es justamente lo que los pedagogos progres (sin excesiva resistencia de nadie, todo hay que decirlo) han procurado erradicar de las aulas? Por favor, que los niños ya se pasan toda la Primaria jugando. ¿Todavía les hace falta perder más tiempo en la cosa lúdico-festiva?

Yo, desde luego, a Punset, lo primero que le diría es que a ver si tiene los santos pelendengues de enfrentase a según qué jaurías de adolescentes –de botelloneros asilvestrados que no quieren estar allí ni atados, que no hacen más que molestae y a los que no puedes ni echarlos de clase– un día de diario, preferiblemente a las últimas horas, a ver si puede contarles él todas estas milongas. Y, luego, que si quiere compartir con la humanidad ese tesoro, pues nada, que ponga un colegio y, vía cheque escolar, recabe la adhesión voluntaria de los padres que así lo deseen, como, con todos mis respetos, pueden hacer Savater, Marina, los obispos, los de la Educación para la Progresía o el sursum corda. O que a esos colegios les coloquen sus libros o lo que sea. Ahora, lo mismo unos que otros, de intentar hacérnoslo tragar a los demás por la fuerza y con nuestro dinero, ni hablar.
Y lo mismo me estoy adelantando a la jugada más de la cuenta, pero, tal como están las cosas, no creo que esté de más curarse en salud.

Por cierto, todo eso que dice de la afectividad, de las diferencias entre hombres y mujeres, ya se ve perfectamente –afirmado, negado, re-matizado y vuelto del derecho y del revés una y mil veces- a través de la literatura. No tienen que venir los científicos a contárnoslo. Ya se ve en la lírica de todos los tiempos, en La Celestina y en tantas otras obras. Pero ahora resulta que ya no hay tiempo ni ganas de que se pueda enseñar La Celestina en condiciones. Hay que ir a uña de caballo y conformarse con “lecturas juveniles” de nula calidad, no sea que los niños se traumaticen si leen a los clásicos.

Germánico said...

Al margen de todo lo demás la propuesta de Punset me parece enteramente cursi.