Expectativas adaptativas: los camellos ¡por las nubes, Mari!
Si la sucesivas inyecciones de dinero de la FED han tenido como consecuencia (entre otras consecuencias, desde luego) que los inversores se han deshecho de sus activos en dólares para adquirir otros más estables, es decir, petróleo, materias primas, oro...
Y esto ha llevado (entre otras cosas, desde luego) a que el precio del oro, las materias primas y el petróleo se disparen...
De la siguiente noticia se puede sacar una clara conclusión.
Noticia: SE DISPARA LA VENTA DE CAMELLOS EN LA INDIA POR LOS ALTOS PRECIOS DEL PETRÓLEO.
Con el calentamiento global encima que nos tiene tan perjudicados, el precio del petróleo como se está poniendo, y la crisis (con permiso de la autoridad) dando caña, que la inflación ya va por el 5% y subiendo... está claro que los camellos son la mejor inversión que puede hacer usted, porque se van a poner de moda en todo el Mediterráneo, además de La India y otros países del más allá. La aristocracia española este año se va a mover en camello por Palma, y si no, al tiempo.
Sí señor, coja sus ahorros y cómprese un rebaño de camellos, que son muy sufridos y no gastan nada. Ya verá, se los quitan de las manos...
Y esto ha llevado (entre otras cosas, desde luego) a que el precio del oro, las materias primas y el petróleo se disparen...
De la siguiente noticia se puede sacar una clara conclusión.
Noticia: SE DISPARA LA VENTA DE CAMELLOS EN LA INDIA POR LOS ALTOS PRECIOS DEL PETRÓLEO.
Con el calentamiento global encima que nos tiene tan perjudicados, el precio del petróleo como se está poniendo, y la crisis (con permiso de la autoridad) dando caña, que la inflación ya va por el 5% y subiendo... está claro que los camellos son la mejor inversión que puede hacer usted, porque se van a poner de moda en todo el Mediterráneo, además de La India y otros países del más allá. La aristocracia española este año se va a mover en camello por Palma, y si no, al tiempo.
Sí señor, coja sus ahorros y cómprese un rebaño de camellos, que son muy sufridos y no gastan nada. Ya verá, se los quitan de las manos...
Además, quítese la corbata, si la lleva, y coma usted conejo que está de oferta.
(Me siento mucho más solidaria, social, concienciada y mala gente... ).
7 comments:
En términos de economía, y atendiendo las predicciones de Samir Amin, y no obviando las consideraciones de la cepal ¿serías tan amable de pasrme el tf de tu camello?
es que yo tambien quiero.
Hmmm, ¿la próxima burbuja especulativa será la de los camellos? Las PuntoCom, la vivienda, las materias primas.. y ahora los camellos?
"There is always a bubble someplace. In a world of fiat currency and fractional-reserve banking, where money is effortlessly multiplied and pyramided, the sequence of boom and bust become inevitable, like the sequence of the seasons."
¿Y por qué la gente compró casas pudiendo ahorrar? ¿Quizá porque no hay camellos en España?
Tumbaíto, porque con los tipos tan bajos (artificialemnte bajos, recuerde que es un precio intervenido) era lo mejor. Funcionamos por incentivos.
Ignacio... la información no es gratuita :P
Yo hace años que mantengo que "el fenómeno del ladrillo" en último término es un fenómeno monetario.
Por un lado, lo que usted dice y, por el otro, que los ahorradores no ahorraban dinero sino que compraban casas porque los "intereses" que le daba una casa no se lo daba tener el dinero en una cuenta.
De hecho, creo que el precio del petróleo es también un fenómeno monetario (la gente huye como del diablo del dinero "público").
¡No sabes la oferta que me han hecho por mis dos camellos! De todas formas no pienso venderlos: comen poco y beben menos; además me dan conversación. Lo que ocurre en España era previsible; si hablamos de economía, claro está. Cuando el BCE decide en el año 2001 bajar los tipos de interés para ayudar a las economías de Alemania, Francia e Italia, España se sube a un carro que no le correspondía. Se creó una demanda ficticia de vivienda y la gente picó en el anzuelo. Con unos intereses tan bajos ( tipo de interés real negativo ), los bancos entendieron que su negocio necesitaba un nuevo empuje: prestar a todos; pero lo hicieron en algo que guardaba las suficiente garantías: la vivienda, lo que más se revalorizaba. Los españoles confundieron ostentación con riqueza. Por lo que pueda ocurrir, yo no pienso vender mis camellos; ¡y eso que fumo Lucky!
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